Ficha Arthur Kirkland

Arthur Kirkland

Apodo:
Cejas, anglocejón y derivados; Iggy.

Edad:
17 años.

Sexo:
Masculino

Ocupación:
Ser antisocial. R&R

Curso & Mazo:
Séptimo; Heart.

Objetos personales:
Posee una guitarra de doce cuerdas roja con blanco, la cual cuida como si posesión más valiosa y le gusta tocarla cuando no hay nadie a su alrededor que pueda escucharlo. A veces le gusta componer canciones en ella, pero nunca ha dejado que nadie sepa de ellas y las mantiene escondidas en un pequeño cofre de madera cerrado con llave, donde también tiene otras cosas valiosas.

Entre esas cosas se encuentra una especie de varita mágica con una estrella que nunca ha aprendido a usar correctamente. De hecho es peligroso estar a su alrededor cuando intenta practicar con magia para poder canalizar sus habilidades, podría provocar hasta un huracán.

Tiene un unicornio rosa de peluche, el cual guarda bajo su almohada cuando no está en su habitación y mantiene oculto de todos los demás, pero sin el cual no puede dormir cómodamente. Si tiene que salir de viaje a algún lado, siempre lo lleva consigo.

Descripción Física:
Tiene el cabello de color rubio claro, y aunque intente lo contrario, siempre lo trae desarreglado por lo que dejó de preocuparse por el asunto. Su piel es blanca y pálida, como si nunca estuviera bajo el sol. Tiene unos enormes ojos color verde. Su estatura es 1.73 m, y es de contextura delgada. En realidad no es muy bueno cuando se trata de habilidades deportivas, excepto cuando se trata de football, que es su deporte favorito.
Sin embargo la característica más destacable de Arthur son sus cejas, las cuales por su tamaño siempre le han sido objeto de burlas desde que tiene memoria.
Tiene un tatuaje de una guitarra eléctrica que no deja que nadie vea y no está muy seguro de cuando se lo hizo.

Características especiales:
Arthur tiene unas orejas de conejo que sobresalen de su cabeza, las cuales detesta y por lo tanto siempre mantiene ocultas, al igual que su cola, y sólo muy rara vez las hace visibles. De hecho, cuando se asusta o es sorprendido de alguna manera, lo más probable es que se vuelvan visibles de nuevo sin que se dé cuenta. Piensa encontrar la forma de deshacerse de ellas totalmente algún día.

Posee la habilidad de poderse comunicarse con criaturas mágicas con las que nadie más puede, como los unicornios o hasta los dragones, e incluso con animales como los conejos si estos así lo desean, sino sólo escuchará los simples ruidos que escuchan los demás. Puede convocar hadas, las cuales revolotean a su alrededor gran parte del tiempo, y él las considera sus amigas.

Puede afectar el clima de acuerdo a su estado de ánimo si este es muy intenso sin que pueda controlarlo aún de ninguna manera. Puede nublar el día o hacer llover si se encuentra bastante mal, o provocar un fuerte viento. En raras, muy raras ocasiones, puede provocar un día soleado, de hecho sólo recuerda haberlo hecho en una ocasión, hace tanto tiempo que a veces duda de si en verdad fue él o sólo una coincidencia.
No le gusta que nadie se entere de esta habilidad, pues siente que eso lo hace vulnerable ante los demás. Se supone que nadie debe saber nada de sus sentimientos.

Imagen del personaje:

Spoiler:

Descripción Psicológica:
Arthur es alguien que fácilmente puede pasar por amargado o enojón, pero eso no es más que una especie de máscara para que los demás no se den cuenta de lo que verdaderamente siente, pues tiene la idea de que eso lo haría vulnerable ante los demás. Lo único que busca es no ser herido. Es bastante cínico y sarcástico, siempre buscando una forma de criticar lo que a sus ojos no está bien, aunque muchas veces lo que dice no es lo que piensa en realidad, pero forma parte de esa armadura que él mismo se ha creado y que no dejará que nadie traspase. Le gusta mucho mantener el control en cualquier situación donde se encuentre metido, y muy difícilmente aceptará ser subordinado de alguien más, odia tener que obedecer órdenes, por eso le produce cierta satisfacción el romperlas, sin pensar mucho en las reales consecuencias que esto podría tener, o al menos fingir que no le importa. Le gusta llevar la contraria.

Mentir no es algo difícil para él, hará prácticamente cualquier cosa con tal de conseguir su cometido, siempre y cuando eso no dañe su orgullo o dignidad. Pero cuando se trata de ayudar a alguien o hacer algo en lo que en realidad no tiene tanto interés, no le pondrá nada de empeño y lo más probable es que no resulte bien.

Pero fuera de eso, dentro (muy dentro) puede ser una buena persona, aunque no le guste mostrar ese lado de él, a excepción cuando se trata de caballerosidad, pues él tiene los modales y se considera un caballero, por lo que no le faltaría el respeto a alguien (menos si es chica) si no cree que se lo merezca, si se lo merece tiene un vocabulario bastante extenso. También es bastante inseguro de sí mismo, aunque se esfuerza mucho por demostrar lo contrario.

Sus gustos:
Le gusta estar solo en su habitación y escuchar música sin tener ningún tipo de molestia a su alrededor, o simplemente ponerse a tocar la guitarra o leer algún libro. Él dice que prefiere estar solo ha rodeado de personas, por lo que pasa la mayor parte del tiempo de esa manera.
Le gustan mucho los animales, especialmente lo que son los conejos y los unicornios. Siempre ha deseado tener un unicornio, aunque sabe que es prácticamente imposible, pues son bastante raros.
Tiene una extraña inclinación por todo lo relacionado con el ocultismo y la magia un poco más oscura de lo normal. Colecciona varios libros que hablan del tema, e incluso ha intentado lanzar sus propia maldiciones y convocar criaturas no muy agradables; pero aunque le cueste admitirlo, rara vez salen bien estos intentos, aunque él asegura que será un experto muy pronto y está decidido a lograrlo.
Le gustan los scones acompañados de una taza de té. Su platillo favorito es el fish and chips.
El alcohol, especialmente el ron. Lamentablemente se embriaga con mucha facilidad, y no es conveniente que tome. Pero aun así lo hace.

Sus disgustos:
Odia el ruido y el escándalo, aunque en realidad solamente cuando él no tiene nada que ver en ello.
Tampoco soporta defectos en las personas como que sean demasiado insistentes, molestas, etc.
Detesta las muestras de afecto, y menos aún si son dirigidas hacia él (o eso quiere creer), especialmente cuando son en público.
También odia cuando las personas critican su buen gusto en la cocina, o con que critiquen cualquier cosa que tenga que ver con él es suficiente.

Historia:
Arthur nació en el medio de una familia grande, tiene algunos hermanos pero la verdad es que nunca se llevó muy bien con ellos y lo más fácil para él es pretender que no existen y trata de mantenerlos lo más fuera posible de su vida. Desde pequeño siempre fue bastante independiente, pero sobre todo inseguro, y nunca tuvo muchos amigos. De hecho, no recuerda haber tenido alguna vez algún amigo cercano, y se volvió bastante receloso con las personas. Prefería pasar horas enteras jugando solo en el bosque, aunque muy dentro, y eso jamás lo dirá en voz alta, le hubiera gustado tener a alguien a su lado.

Desde el momento en que descubrió que tenía algunas habilidades especiales que los demás niños no, trató de aprender cómo controlarlas y encontrarles un beneficio, aunque fueron esfuerzos en vano debido a su corta edad y al intentarlo por su propia cuenta, de cualquier forma sigue asegurando que no necesita a nadie.

Su madre murió cuando tenía siete años, y ese día hubo una gran tormenta en Wonderland, que continuó a lo largo de días. Sin su madre era como si hubiera quedado a la deriva, pues era prácticamente la única que lo apoyaba y comprendía, pues la relación con su padre nunca fue muy estrecha. Después de unos días llegó a la conclusión de que ya nada lo ataba a ese lugar y ahora era libre de hacer lo que quisiera, totalmente ajeno a la situación de Wonderland, era como si viviera en su propio pequeño mundo.

Un día despertó muy temprano gracias a una pesadilla, cuando el sol aún no salía y el cielo estaba oscuro, y decidió que ese sería el momento. Simplemente tomó sus pocas pertenencias, las más importantes, y salió de casa sin despedirse de nadie, dirigiéndose hacia cualquier lugar, pues cualquier lugar era mejor que donde se encontraba.

Lamentablemente fue intercetpado después de unas semanas de ir de un lado para otro, tomando un trabajo aquí y otro allá, y fue cuando se enteró del nuevo decreto de la Reina. No le molestaba lo de que les fueran a cortar las cabezas, pues él se creía lo suficientemente superior para escapar a ese destino, sino el hecho de que ahora tendría que ir al instituto. Su madre le había enseñado como hacer una fiesta de té (a veces hacía con sus hadas) y a cantar el No Cumpleaños, por lo que creía que era bastante estúpido.

Al principio simplemente decidió que ignoraría todo eso, no iría y seguiría con su vida con normalidad, pero fue llevado a la fuerza. Piensa que el instituto es una enorme pérdida de tiempo para él, y por ello no le importa romper alguna que otra regla cuando lo considera “necesario” e incluso ha intentado escaparse varias veces, pero no lo ha logrado todavía. Y por suerte para los demás, la Reina no se ha enterado.

Otros datos:
Nunca aprendió como nadar, pero eso se supone que es un secreto.
Uno de sus pasatiempos preferidos es el bordado y hacer manualidades, aunque tampoco ha permitido que nadie sepa hasta hoy.
Le gustan mucho los piratas y de pequeño solía jugar mucho a ser uno con una pequeña espada de juguete.

Nombre del Personaje Real: Arthur Kirkland
Nombre del Manga/Anime: Hetalia Axis Powers

“A crazy wonderful land for the nice people”

Falta un pequeño detallito de las reglas~ Fuera de eso, todo está en orden. Una vez que lo arregles, la ficha está aceptada.


Ficha aceptada. Ahora mismo se te otorgará color. Recuerda pasar por los registros de personaje.